El vidrio laminado lo ideó el francés Édouard Bénédictus (1878-1930), en el año 1903. Decorador, pintor, compositor y químico, vio en la caída de un vaso de vidrio por casualidad, como este no se rompía en pedazos a causa de que contenía en su interior, restos de una solución de nitrato de celulosa, que formaba una película alrededor.
Édouard Bénédictus fue el primero en depositar una patente, concretamente el 25 de noviembre de 1909, sobre un procedimiento para la producción del vidrio laminado.
El inglés John C. Wood de manera paralela desarrolló un método similar y empezó a comercializarlo bajo la marca Triplex, que fue la primera en aplicarse en la producción de automóviles de la empresa estadounidense Ford.
100 años del parabrisas laminado
Este año 2021 se cumplen 100 años del parabrisas laminado. Este tipo de vidrio supuso una revolución en el mundo del automóvil, ya que sustituía al cristal que llevaban los primeros vehículos y que al romperse provocaban heridas y lesiones muy graves que incluso podían causar la muerte de sus ocupantes.
Aunque fue todo un avance sobre todo por la seguridad y resistencia que otorgaba a los vehículos, las primeras láminas plásticas se oscurecían y se rompían por el paso del tiempo.
A partir de ese año los avances y las mejoras en el vidrio laminado no se hicieron esperar. Se presentaron y patentaron distintas resinas sintéticas entre ellas la inventada en 1938 por Carleton Ellis, llamada butiral de polivinilo (PVB). Esta resina no decoloraba el vidrio con el paso del tiempo y también ayudaba a mitigar los efectos de los rayos UV.
¿Qué es el vidrio laminado?
El vidrio laminado está compuesto por dos o más vidrios unidos mediante películas intermedias fabricadas con materiales plásticos, que se someten a un proceso de calor y presión. Estas láminas plásticas evitan que en caso de rotura, se desprendan fragmentos del vidrio, ya que estos quedan adheridos a ella, evitando así accidentes.
Las capas con las que se unen los vidrios se van intercalando y están compuestas de butiral de polivinilo (PVB), etil-vinil-acetato (EVA) o resinas que se activan por la mezcla propia de sus compuestos o a través de luz ultravioleta.
Muchas veces se utiliza vidrio templado para que sea aún más resistente o bien un cristal laminado de mayor grosor, para garantizar en los lugares que lo requiera, una mayor resistencia.
Un ejemplo de ello son los edificios ubicados en zonas donde las inclemencias del tiempo como, huracanes, ciclones, tifones o grandes tormentas y vendavales son más frecuentes.
Usos del vidrio laminado en la actualidad
Hoy en día el vidrio laminado se utiliza en aplicaciones de todo tipo y dentro de distintos sectores, siendo el de la construcción y el diseño de espacios, tanto interiores como exteriores, donde más se utiliza. Por ejemplo en:
- Suelos
- Barandillas
- Escaleras
- Mamparas de oficina
- Puertas de seguridad
- Locales comerciales
- Fachadas acristaladas de grandes corporaciones y edificios
- Mesas
- Estanterías, etc.
El vidrio laminado ofrece seguridad y protección frente a impactos, un aislamiento tanto térmico como acústico considerable, mayor durabilidad en el tiempo, control solar si se desea porque se puede optar por añadir láminas que filtran los rayos UV y lo más novedoso elegir láminas de color.
Estas láminas de color permiten realizar muchos proyectos a arquitectos, diseñadores e interioristas que antes no se podían llevar a cabo. Un claro ejemplo es el edificio del MUSAC. La fachada del Museo de arte Contemporáneo de Castilla y León MUSAC está compuesta por más de 3.350 vidrios (de ellos, 2.719 son translúcidos), con un total de 37 colores distintos.
Las láminas de butiral de polivinilo (PVB) coloreadas, cuentan con infinidad de colores, ya que pueden ser colores puros o la combinación de estos para conseguir una gama muy extensa.
Este tipo de vidrios coloreados pueden tener acabado en transparente, translúcido u opaco. Su belleza, resistencia y durabilidad lo convierten en un material indispensable para cualquier profesional que precise su implementación en sus proyectos creativos.
En Decoroffice ofrecemos a nuestros clientes vidrios que se adaptan a cualquier necesidad o proyecto, siendo el vidrio laminar uno de los que más utilizamos en el diseño de interiores, como son escaleras, suelos, barandillas, mamparas, encimeras, etc., y fachadas acristaladas.